Actualmente existen muchas incógnitas en lo referido a la Economía Circular y más cuando el mundo entero está atravesando un nuevo paradigma que está afectando a la salud de todos, pero también a la economía mundial.
¿Por qué es importante la economía circular en la era post-covid? ¿Cómo la podríamos aplicar? ¿Cuáles son los 3 principios de la economía circular?
Todas ellas de vital importancia para entender este nuevo tipo de economía mucho más respetuosa con el medio ambiente.
Descubriendo la Economía Circular en la era post-covid
La Economía Circular es una alternativa atractiva y viable que han empezado a explorar distintos gobiernos, empresas, instituciones locales y entidades científicas y sociales. Pero esta transición hacia este tipo de economía implica combinar diferentes medidas y estrategias, adquirir conocimientos, implementar el ecodiseño, …… ¿Cómo? ¿Cómo se hará a partir de ahora?
Algunas noticias resaltan que la Economía Circular será el antídoto perfecto para la reconstrucción de la sociedad post Covid porquerealmente cualquier empresa de cualquier sector que tenga actividad propia puede aprovecharse de los beneficios que este nuevo sistema puede traerle a su negocio en la era post-Covid.
Hablamos de que es una economía que busca la eficiencia por diseño y la eficiencia lleva intrínseca el ahorro, Medidas como la prevención de residuos, el diseño ecológico y la reutilización podrían generar ahorros netos de 600.000 millones de euros y beneficios como reducir la presión sobre el medio ambiente, mejorar la seguridad de suministro de materias primas, más competitividad, innovación, crecimiento y la creación de hasta 580.000 empleos en la UE.
Ahora mismo el coste del impacto negativo medioambiental y social de la actividad económica está totalmente deslocalizado y se asume en muchas ocasiones por parte de organizaciones medioambientales, sociales o los propios gobiernos. Es decir, que los beneficios se internalizan y los impactos negativos se externalizan. Cada vez se está pidiendo mayor responsabilidad y compromiso por parte de las empresas y este compromiso se está regulando a través de una legislación más estricta respecto a la generación de gases efecto invernadero, residuos y prácticas contaminantes.
Reconstruir una sociedad que ha sufrido tanto este “parón” económico y social requiere de nuevas estrategias más resilientes que preparen a las personas para asumir diversos papeles en este sistema económico circular.
Además, el confinamiento hizo que se aprovecharán todos los recursos que se tenían al alcance, modificando los hábitos de consumo y haciendo que los consumidores consideren más seriamente los impactos en la salud y el medio ambiente en sus opciones de compra (Accenture, 2020a).
La agenda política es consciente del cambio de paradigma, y está tomando medidas al respecto como se evidencia, por ejemplo, en la aprobación de la Estrategia Española de Economía Circular, España Circular 2030 (Gobierno de España, 2020), donde la reducción del consumo nacional de materiales, la reducción de residuos y de emisiones de gases de efecto invernadero, incrementar la reutilización y mejorar la eficiencia en el uso del agua se encuentran dentro de sus objetivos.
Ahora mismo, son muchas empresas grandes y pequeñas que están apostando por la Economía Circular, pero todavía no está generalizado ya que todavía existen muchas reticencias pero realmente cualquier negocio tiene la capacidad de implementar la economía circular, ya que la prioridad en sí es igualmente satisfacer las necesidades reales del cliente, pero desde una perspectiva circular.
Los negocios ahora van a ser bidireccionales, porque el consumidor cada vez demanda prácticas más transparentes y quiere saber qué está financiando con su compra. Si la empresa es capaz de dar respuestas concretas y coherentes sobre la procedencia de sus productos, los beneficios que puede generar su compra tanto para él como para todos los agentes implicados (personas y medio ambiente) y asimismo ser capaz de aportar más valor y calidad, el consumidor realmente quedará satisfecho con su compra. Innovar requiere de valentía y anticipo.
Si no innovas o comienzas a generar cambios, el propio mercado te impondrá nuevas normas que tendrás que acatar sin tener casi tiempo de transformarte. Ahora es el momento idóneo de cambio. Si después de una crisis, no sales cambiado, volverás a caer en los mismos errores. El futuro es de quien lo construye, quien lo sueña y quien lo crea. El futuro será de aquellas empresas que a pesar de la incertidumbre van más allá de sus propios beneficios y buscan generar un impacto positivo con su actividad, positivo para ellas, para el medio ambiente, para la economía y para la sociedad. Para ello la economía circular es un modelo estudiado, validado, cuyo reto está ahora en la implementación.
Es así que el nuevo modelo económico (economía circular) supone una sustancial mejora común tanto para las empresas como para los consumidores y el medio ambiente: dar un mayor uso a los materiales; reutilizar recursos es más rentable que crearlos de cero; reducir o eliminar impactos medioambientales evita la proliferación de residuos; y al aumentar la vida de los productos se fomenta el desarrollo de la innovación (económico y social) para ofrecer nuevos usos, lo que a su vez promueve la creación de puestos de trabajo.
La transición de la economía lineal a la circular implica combinar diferentes medidas técnicas y estratégicas, adquirir conocimientos sobre el análisis de ciclo de vida, el ecodiseño, la gestión eficiente de la energía, la eficiencia y rentabilidad en el uso de los recursos y la gestión de residuos, la incorporación de costes ambientales en los precios, la sustitución del consumo por el uso, la mejora de sistemas productivos, entre otros.
Referencias
Accenture. (2020a). COVID-19 Increasing Consumers’ Focus on “Ethical Consumption,” Accenture Survey Finds.
Accenture. (2020b). Superar la incertidumbre gestionando el impacto económico y humano del Covid-19.