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El ecodiseño, un factor clave en una economía circular

Medidas como aligerar los envases, eliminar tintas y metales pesados o utilizar materiales reciclados suponen un ahorro para las empresas y un beneficio medioambiental neto.

El ecodiseño no es sólo una fuente de beneficios económicos para las empresas, sino que además es el origen de la cadena de reciclaje y permite minimizar el consumo, así como las emisiones y los vertidos. El ecodiseño es la piedra angular de la economía circular; hacer envases sostenibles que se reciclen mejor o introducir materiales regenerados es lo que permite cerrar el círculo de producción.

Por eso, es fundamental trabajar desde la prevención antes de que se genere el residuo. Solo así conseguiremos implantar un modelo de desarrollo sostenible basado en la economía circular. De esta manera, seremos más eficientes y protegeremos mejor nuestros recursos naturales.

Un nuevo modelo de diseñar, producir y consumir es posible 

El Ecodiseño es uno de los principales instrumentos para generar productos y servicios de calidad, respetuosos con el medioambiente y socialmente responsables. El Ecodieño debe tener en cuenta los elementos básicos que hacen que un producto sea vendible y que van desde su aspecto o estética hasta su función, pero a diferencia de en la ya caduca economía lineal, también debe valorar todos los estadios de su cadena de producción y de distribución, además de los aspectos económicos y comerciales.

Pero para hablar de Ecodiseño como modelo de desarrollo de productos completo debemos involucrar otros conceptos que tengan en cuenta sus repercusiones medioambientales y sociales.

Como concebir un producto ecológico desde su inicio

En el diseño de un producto o servicio, empezamos definiendo sus características y procesos: composición, materias primas a utilizar, como lo fabricaremos, como lo transportaremos y como haremos su comercialización. Pero pensaremos también en su utilidad y funcionalidad, su durabilidad y como gestionaremos su vida útil, especialmente en la fase final del ciclo. El desglose del ciclo de vida de un producto lo podemos estudiar en sus diferentes fases:

Fase pre productiva:

  • Obtención de materias primas y procesamiento de las mismas.
  • Obtención de las materias primas respetuosas con el medioambiente y socialmente responsables.
  • Utilización de materias que necesiten transporte con un consumo de energía bajo y poco contaminante.

Fase productiva:

  • Uso de materias primas que produzcan pocos residuos y costes bajos.
  • Utilizar la menor cantidad de agua y energía.
  • Tener en cuenta unes buenas condiciones laborales y sociales.

Fase de comercialización y distribución:

Diseñar el producto pensando en su transporte, embalaje e instalación, minimizando el posible impacto al máximo y mejorando su eficiencia, desde el inicio del ciclo.

Fase de vida útil del producto (uso y consumo):

El producto debe ser de calidad y ofrecer seguridad y funcionalidad, además de ser sostenible, estéticamente atractivo, de larga durabilidad, ergonómico, saludable y ajustados a la legalidad y además al menor coste posible. Que sean fácilmente reparables, alargando de éste modo su vida útil.

Gestión final:

Al final del ciclo han de ser reutilizables y de fácil reciclaje, permitiendo su retorno a la producción como materias primes de segunda vida. Como conclusión decir que las decisiones que se toman durante el desarrollo de productos, procesos y servicios determinan enormemente su impacto ambiental potencial sobre el medio ambiente. Los materiales, forma, peso, proceso de fabricación, durabilidad, etc. son aspectos cruciales que deben ser considerados minuciosamente para prevenir o minimizar los impactos ambientales del producto o servicio resultante, considerando su ciclo de vida completo.

El ecodiseño es una metodología que tiene en cuenta los criterios ambientales en el proceso de desarrollo de productos, procesos y/o servicios, desde la etapa de diseño. Estos criterios se consideran al mismo nivel que otros relativos a la calidad, legislación, costes o durabilidad. Su aplicación implica que los aspectos ambientales se convierten en variables consustanciales al proceso. Como resultado, los productos ecodiseñados son más innovadores y tienen un mejor comportamiento ambiental, además de reunir el resto de requisitos técnicos, económicos, normativos y de funcionamiento.

¿Te apuntas al ecodiseño?