El aumento de la población y la escasez de los recursos hacen necesario un cambio de paradigma, del concepto “producir-usar-tirar” a un sistema sostenible y competitivo en el que se haga un uso eficiente de los recursos. Esto se conoce como economía circular. Leer más sobre esto aquí: ‘Economía circular, la importancia de reutilizar productos i materiales’.
En este sentido, el plan sobre Economía Circular de la Comisión Europea, persigue la creación de una economía sostenible, limpia y competitiva que aporte beneficios la industria y la sociedad. Los objetivos marcados en este plan están alineados con la Agenda de Desarrollo Sostenible para 2030 de las Naciones Unidas, en particular con el objetivo 12, “Producción y consumo sostenible”.
Actores en la economía circular
Las autoridades
Autoridadesa todos los niveles, responsables de diseñar acciones que impulsen la transición hacia la economía más sostenible a través de un marco legal adecuado, financiación que apoye iniciativas innovadoras y transmisión de información a todos los agentes de la cadena de valor.
El pasado mes de noviembre, el MINECO aprobó el Plan Estatal Marco de Gestión de Residuos (PEMAR) 2016-2022, el cual establece las líneas las líneas estratégicas para avanzar en lo relativo a la economía circular e impulsar la preparación para la reutilización y el reciclado.
Tejido empresarial
Agente clave en la selección de materias primas, pasando por el diseño del proceso del producto (más duradero o más fácil de reparar y con materiales reciclados). El estudio de GreeBiz y UPS sobre economía circular indica que el 86% de los ejecutivos de sostenibilidad encuestados creen que la economía circular será importante para su negocio en los próximos dos años.
El Clúster de Cambio Climático, coordinado por FORETICA tiene como objetivo servir de punto de encuentro empresarial en liderazgo, conocimiento, intercambio y diálogo en esta materia. 29 empresas líderes en mercado forman parte de esta iniciativa.
El consumidor
Cuya decisión de compra influye directamente en la economía circular. Es necesario tener en cuenta el factor precio y la información transmitida sobre los procesos, la vida útil de los productos o modelos de consumo más eficientes.
En su planteamiento para cerrar el círculo fomentando la economía circular, la Comisión Europea determina 5 áreas prioritarias entre las que destacamos los plásticos, los residuos alimentarios y la biomasa y los bioproductos.
¿Cómo se gestionan actualmente los envases plásticos?
Dada la funcionalidad que aportan y su bajo costes, los plásticos son un factor clave de la economía moderna. El consumo de estos materiales ha aumentado veinte veces el pasado medio siglo (debido en parte al cambio de los estilos de vida de los consumidores), y se espera que se duplique en los próximos 20 años.
Sin embargo, la inapropiada gestión tras su primer uso supone enormes pérdidas económicas y un elevado impacto ambiental. Según el informe elaborado por Plastic Europe en 2015, el uso que se da a los materiales plásticos tras su uso se distribuye en: vertedero (30.8%), reciclaje (29.7%) y recuperación energética (39.5%), lo que muestra que hay camino por recorrer en lo que a una gestión sostenible se refiere. En este artículo te detallamos más este tema: ‘Cómo hacer economía circular a partir del plástico’.
Por su parte, el PEMAR en España, apuesta por la recogida separada y aplicar el principio de jerarquía de los residuos para reducir la eliminación de los mismos y fomentando de esta forma la reutilización, el reciclado y otras formas de valorización.
En la pasada conferencia anual del World Economic Forum en Davos, se prestó especial atención a la gestión de los materiales plásticos y su impacto medioambiental, sobre todo en el ecosistema marino, evidenciándose así la necesidad de gestionar mejor los envases plásticos.
Durante una de las sesiones, se comentaron los principales resultados de la publicación “The New Plastics Economy Rethinking the future of plastics” elaborada por la propia organización. En España, ECOEMBES (entidad sin ánimo de lucro) se dedica a la recuperación de envases. Entre las acciones que desarrolla se encuentra el fomento de la separación de residuos.
A nivel Europeo, está PRO EUROPE (Packaging Recovery Organization Europe), organización responsable de la recuperación de residuos de envases bajo la marca “punto verde” que estamos acostumbrados a ver en los envases. Las iniciativas que derivan del planteamiento de la Comisión Europea y del World Economic Forum son diversas y van dirigidas a la optimización del uso de envases plásticos así como su reutilización, reciclado y recuperación energética.
¿Reciclamos, reutilizamos o nos reinventamos?
Entre iniciativas planteadas, se encuentra la optimización de los sistemas de recogida y clasificación, intentando desviar los plásticos reciclables de los vertederos e incineración hacia el reciclado. Las tecnologías ópticas basadas en el infrarrojo cercano permiten la identificación automática de cada tipo de polímero, facilitando una separación más precisa.
Otra alternativa se basa en el uso de marcadores químicos (tintas por ejemplo) capaces de ser detectadas por un sistema de separación. En este sentido, el proyecto Polymark tiene como objetivo el desarrollo de marcadores que recojan información relativa a la estructura y propiedades del envase plástico así como sistemas de identificación que puedan detectar y descodificar estos marcadores.
Otra de las iniciativas versa sobre mejorar la reciclabilidad de los plásticos, bien eliminando ciertos aditivos o utilizando múltiples materiales adhesivos que permitan una fácil separación de los mismos. La colaboración entre Dow Chemical, Printpack and Tyson Foods ha resultado en un envase tipo pouch 100% polietileno, el cual presenta una reciclabilidad mayor que las alternativas multi-material.
Esta iniciativa está muy relacionada con la prevención en origen, es decir el diseño de envases que garantice una reducción de peso y uso de materiales más sostenibles. En cuanto a los materiales plásticos, los bioplásticos contribuyen a los objetivos de la economía circular, en algunos casos por su capacidad para ser biodegradados. El cluster European Bioplastics representa la industria de los bioplásticos Europea. Este sector tiene la capacidad para desarrollar soluciones tecnológicas innovadoras y alinear los objetivos industriales con la sostenibilidad ambiental.
El proyecto PHBOTTLE persigue el desarrollo de nuevos envases 100% biodegradables y con propiedades antioxidantes a partir de las aguas residuales de la industria del zumo. Los envases desarrollados se emplearán en la industria del zumo, cerrando de esta forma el ciclo. Por otra parte, el proyecto WHEYPACK se centra en la obtención de envases plásticos a partir de suero lácteo.
Es el momento de actuar
Las principales barreras con las que se encuentra la industria son la financiación y la falta de información. En el marco de H2020, la Comisión ha lanzado ayudas dirigidas al fomento de las tecnologías y soluciones que apoyen la economía circular.
Por otra parte, el proyecto GreenEcoNet financiado por la Comisión proporciona a la industria apoyo en la transición hacia la economía circular. La plataforma desarrollada permite el networking y la transferencia de buenas prácticas.
Aunque las iniciativas relativas a la economía circular no tienen, en general, un retorno inmediato en la cuenta de explotación y por tanto no son consideras por el tejido empresarial como una prioridad, desde nuestro punto de vista es un planteamiento a tener en cuenta a medio/ largo plazo.