Un año después de la entrada en vigor del Real Decreto 293/2018 sobre reducción del consumo de bolsas de plástico, que establecía el cobro de todas las bolsas ligeras (entre 15 y 50 micras), el Ministerio para la Transición Ecológica no ha publicado ningún dato oficial sobre la reducción del consumo de bolsas ligeras.
Esta semana se celebra el Dia Internacional Libre de Bolsas de Plástico para concienciar que aún queda mucho trabajo para reducir este consumo.
Consumo en España
En España (según datos de ANAIP, Asociación Española de Industriales del Plástico), existen 700 empresas dedicadas a la producción y distribución de bolsas con un empleo directo total de 11.000 trabajadores.
En la actualidad se habla de unas cifras de consumo en España de unos 10.500 millones de bolsas que equivalen a unas 100.000 toneladas de plástico al año. Las cifras hablan de que solo un 10% de estas bolsas se reciclan, aunque estudios de población indican que los usuarios la destinan a otros usos, por ejemplo, según un informe elaborado por la consultora D’Aleph para la Generalitat Catalana, el 70% de los encuestados afirma que le da al menos un segundo uso, principalmente como bolsa de basura.
Por tanto, es necesario, frenar este abuso y cambiar la situación, puesto que era necesario llegar a una situación más sostenible, donde se dé una minimización en el uso de recursos.
Contaminación
El plástico se ha convertido en el aliado número uno de la contaminación. Su bajo precio hace que uno se deshaga rápidamente de él, y su larga existencia hace que perdure en el medioambiente durante largos periodos de tiempo, en los que puede causar grandes daños.
El plástico no puede descomponerse y se necesita una alta energía de rayos ultravioleta para acabar con él y la cantidad de plástico que se desperdicia en los océanos está aumentando considerablemente.
El plástico actúa como un imán en sustancias tóxicas como el DDT o los PCB. Los investigadores han descubierto que las concentraciones de estas sustancias químicas son millones de veces más altas en el plástico que se utiliza en el mar que en el que se utiliza en el agua circundante, que ingerido por animales, puede hallarse en toda la fauna marina, incluso en el plankton, la clave de la cadena alimentaria marina.
Fauna amenazada
Basuras que llegan al mar, en especial las de tipo plástico, están matando a más de un millón de aves marinas y unos 100.000 mamíferos y tortugas marinas cada año. El material plástico afecta a la fauna de dos maneras importantes: cuando las criaturas se enredan en él y cuando lo ingieren.
- Tortugas: La contaminación plástica afecta especialmente a las tortugas. Las siete especias mundiales de tortuga o están en peligro, o están amenazadas por varias causas. Las tortugas se enredan en las redes de pesca y en algunos casos se han encontrado tortugas con bolsas de plástico en el estómago.
- Mamíferos marinos: Hay mucha preocupación acerca del efecto que la basura plástica tiene sobre los mamíferos marinos en particular, ya que debido a varias causas muchas de estas criaturas ya están en peligro.
- Las aves marinas: Mundialmente unas 75 especias de ave marina han ingerido basura plástica porque los padres dan plástico a sus crías accidentalmente. Los plásticos se quedan en el estomago obstruyendo la digestión y posiblemente provocando una muerte por hambre.
La acción de conservación
El problema de la contaminación plástica es grave y se requieren acciones, tales como:
- Reducción del uso de plástico como envoltorio, el cual normalmente es desechado inmediatamente. La reutilización de los plásticos debe ser más promovida.
- Paquetes y bolsas de plástico deben mostrar una advertencia que alerte sobre los peligros de la contaminación plástica y debe fomentarse entre el consumidor el uso de bolsas propias y bolsas de papel recicladas.
- Los pescadores no deberían lanzar al mar desechos, redes o basura de plástico ya que esto causa muchos daños y muchas muertes.
- Promueve la correcta eliminación de plástico en tu casa y en la playa. Recuerda que la basura crea basura.
- Da ejemplo a otros y anímalos a colaborar.
Hechos sobre el plástico
- Una jarra de plástico tarda 1 millón de años en descomponerse.
- Una taza de plástico puede tardar entre 50 y 80 años en descomponerse.
- El plástico reciclado puede utilizarse para fabricar cubos de basuras, bancos, equipamiento de recreo, cubiertas y kayacs.
- Las guarniciones de la ropa de lana y de las alfombras pueden fabricarse con botellas de plástico recicladas.
- Cada HORA utilizamos 2,5 millones de botellas de plástico.
- Cada año las bolsas de plástico y otra basura de plástico que se vierte al océano acaba con la vida de un millón de criaturas marinas.
- En el mundo sólo se recicla un 3% del plástico.
- El reciclaje del plástico conlleva un ahorro dos veces mayor de energía que la quema o la incineración.
- Aproximadamente se vierten al océano 6,4 mil millones kilos de basura. La mayor parte de ésta es plástico.
- Cada año la industria pesquera mundial vierte alrededor de 152 millones de kilos de plástico al océano, entre otros envasados, redes de plástico, sedales y boyas.
- Cada año fabricamos suficiente película de plástico para envolver nuestro Estado
- Casi cada pieza de plástico que se ha fabricado todavía existe.
El problema ambiental de la bolsa de plástico se centra en dos puntos principales:
El uso indiscriminado que se hace de las mismas y su impacto ambiental relacionado con el abandono de las mismas en cualquier lugar (al igual que pasa con las latas de bebida, las botellas de vidrio, las colillas…).
Ambos puntos pasan por mejorar el comportamiento del ciudadano, hacia una conciencia más sostenible de uso racional de recursos y colaboración en los sistemas de gestión de residuos implantados.
Para ello sigue necesitándose la formación, la información y la sensibilización de los mismos, quizás el aspecto más difícil. Hay que trabajar sobre las cuatro R ́s: Reduce, Reutiliza, Recicla, sé Responsable (no abandona las bolsas de plástico). Si no se va por ese camino por muchos planes que se establezcan para reducir residuos y aumentar su valorización, se fracasará.
Existen soluciones, de modo que los consumidores pueden aunar su derecho a realizar sus compras con las mejores medidas higiénicas y de seguridad junto con su conciencia medioambiental.
Actualmente, el desarrollo e introducción de nuevos materiales y formatos ocurre muy rápido y no está coordinada con el desarrollo del correspondiente sistema de reciclaje o reuso de estos nuevos productos.
Lo lógico sería que existiese una colaboración en toda la cadena. La falta crónica de alineación entre la innovación y el reciclaje y también la falta de estándares debería ser resueltas para desbloquear la nueva economía del plástico.
Cuando un nuevo producto o material sale al mercado, con anterioridad se debería haber resuelto el sistema de reutilización o reciclaje de éste y no al revés, como está ocurriendo en la actualidad.
El objetivo de la nueva economía del plástico es que los plásticos nunca lleguen a desperdiciarse, sino que vuelvan a entrar en la economía como material válido. Pretenden crear una efectiva economía del plástico después de su uso, reduciendo el plástico que llega a lugares naturales, especialmente al océano.
Puedes leer más sobre el tema en este artículo: El mal uso del plástico agrava la crisi ambiental planetaria